Después de preguntas de amigos, de encuentros esperados o inesperados a través del blog, de comentarios de allegados… estuve pensando…
¿Qué es un blog? ¿Para qué tenemos, entramos, comentamos un blog? ¿Quiénes somos los que elegimos esta herramienta tecnológica y para qué?
Debe de haber miles de respuestas posibles, pero hoy estoy anegada de preguntas retóricas y escribiré aquí algunas:
¿Qué es un blog? ¿Para qué tenemos, entramos, comentamos un blog? ¿Quiénes somos los que elegimos esta herramienta tecnológica y para qué?
Debe de haber miles de respuestas posibles, pero hoy estoy anegada de preguntas retóricas y escribiré aquí algunas:
¿Qué lleva a una persona a querer publicar un texto, una frase, una idea, una imagen en lo que bien podría ser un diario personal y transformarlo en publico, publicarlo? ¿Exponerse, ocultarse, disfrazarse, arriesgarse, anonimarse?
¿Qué buscamos cuando dejamos un comentario en un blog? Expresar nuestro afecto hacia su creador, dejar constancia de que compartimos o discutimos su opinión, que apoyamos su iniciativa, lucirnos con nuestro mensaje, ganar su atención?
¿Qué busco cuando abro mi blog y leo los comentarios que me dejan? ¿Saber quién se acuerda e interesa por mí, ver a quién seducí con mis letras, quién quiere departir conmigo? ¿O busco que me lean, me admiren, me quieran?
¿Qué busco cuando escribo algo en mi blog? ¿Sacudirme la inercia de cada día, olvidar la rutina, tener un espacio propio, “el cuarto propio” de la Wolf, trascender la mismidad? ¿O escribo para exorcizar el miedo, el miedo terrible de nacer solo, de morir solo y en el medio qué?
La Pizarnik, amada Alejandra, se pregunta algo así en “Cold in hand blues” y lo dice mejor que yo:
y qué es lo que vas a decir
voy a decir solamente algo
y qué es lo que vas a hacer
voy a ocultarme en el lenguaje
y por qué
tengo miedo
Como no podía ser de otra manera se aceptan/esperan comentarios…
5 comentarios:
sibila, tu blog sirve, en mi caso, para mirarte objetivamente, es raro, sos de muchas personas a la vez.
Tenés muchas ganas, se nota, estás aprendiendo a exponerte y estás eufórica a la vez que ésta posibilidad es una antesala para publicar y saber definitivamente que lo que escribis sirve (nuevamente esa palabra)el blog está sumando día a día, exelentes las imagenes no te preguntes mas, escribí ecribí escribí escribí
La idea de la inmortalidad es tan antigua como la humanidad. Y sí, a ningún le gustó saberse finito. POr eso, buescaron trascender al tiempo como fuera. Así, los retratos al óleo buscaban dejar huella de quienes podían pagar el arancel del pintor. Hay quien busca la inmortalidad a través de la familia, es decir, de los hijos, nietos, biznietos, tataranietos, choznos y etc.
Y hoy, en el Siglo XXI, cuando sabemos que no hay mucho para hacer, que el tiempo es irrefrenable, nuestra inmortalidad pasa al plano virtual. Y cada espacio en el que escribimos, en el que ponemos una foto, un dibujo o lo que fuera o fuese, es nuestra pequeña inmortalidad.
Y, sí, somos mortales...
Hola!
Muy interesante tu planteo.
Mi blog nacio para que pudiera visitarme La Maga, dueña de un blog que me encanta. Lo que busco --y encuentro-- es comunicarme con personas que aman las palabras, que las necesitan...
Saludos y gracias por este espacio!
Hola Vero!
Me tomo un recreíto del laburo y aporto: en mi caso, como te conté, escribir en el blog se convirtió en un espacio más de expresión. Y está bueno porque sin querer, por ejemplo, conocí a gente como vos. Sin esperarlo ni proponérmelo. Y eso es lo bueno, al menos para mí.
Un gran abrazo y estamos en permanente contacto (muy buenas las palabras de Anais (tu nombre me recuerda a Nïn!!, una genia!! sin embargo, personalmente creo que en esto q llamamos vida terrenal hay algo más que virtualidad y mortalidad, algo presente q hace q "el viento nos amontone...", por ejemplo, inesperadamente, en el blog de verónica).
Edgardo: Tenès razón no me gusta la palabra “sirve”, la utilidad de la literatura! Pero te haré caso y seguiré escribiendo, escribiendo, por las dudas…
Anais: No sé si mis preguntas cuestionaban nuestra mortalidad, creo q el foco estaba más en la soledad, en el nihilismo que nos acecha, en el miedo, que iba más allá del miedo a la muerte; no sé, eran preguntas, pero tal vez el juego sea encontrar las propias respuestas. Gracias por intentarlas acá!
Claudia: Gracias por la bienvenida!
Marcelo: Qué el viento nos amontone… me hace acordar a algo q me dijeron una vez acerca de cómo uno empieza a depurar amigos y al final van quedando los buenos, pasada a adolescencia uno selecciona y la “granja” que forma (o no) tiene que ver más con uno, es uno. “Memorias de Antonia”, peli que recomiendo apoyaría esto.
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